Dudas sobre la efectividad del freno automático que será obligatorio para el 2015 en todos los camiones y autobuses de la Unión Europea

Hola a tod@s

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Saludos a tod@s y gracias por leerme.

Empezamos una nueva temporada con un artículo de ADAC, una institución alemana independiente para la seguridad vial, que colabora con agencias como la EuroNCAP para crash-test, además de hacer sus propios ensayos y experimentos.

El último blanco de sus estudios es la nueva normativa de la Unión Europea, que exige que para 2015 todos los camiones tengan un sistema de freno automático que pueda reducir de forma autónoma su velocidad en al menos 10 km/h antes de un impacto con otro vehículo. Al ADAC le parece más que insuficiente y demuestra el por qué.

Creen que las posibilidades técnicas actuales permiten mucha mayor reducción, y fabricantes de camiones como MAN o Mercedes ya han demostrado que pueden detener camiones pesados de forma autónoma en poca distancia y al completo. ADAC cree que un sistema tan poco exigente sigue poniendo en peligro muchas vidas y lo demuestra con un crash-test capaz de dejarnos un mal cuerpo importante. ¿Qué ocurriría si un camión de 5,5 toneladas impactase a 70 km/h contra dos coches situados tras otro camión?

ADAC explicita que el camión habría reducido su velocidad de forma autónoma desde los 80 km/h, pero un impacto a 70 km/h – incluso por parte de un camión ligero – no deja posibilidades de supervivencia alguna para los ocupantes del Renault Mégane y el Mitsubishi Lancer atrapados tras el otro camión. Es terrorífico comprobar como el camión hace papilla al Renault sin apenas inmutarse y aplasta al Mitsubishi contra el otro camión. Los coches quedan absolutamente irreconocibles, nada más que un amasijo de hierros.

Ningún ocupante habría podido sobrevivir, pero sí lo podrían haber hecho si la velocidad de impacto del camión hubiese sido de 40 km/h. ADAC quiere presionar a la UE para que endurezca su normativa, exigiendo que el camión frene de manera autónoma reduciendo su velocidad en al menos 40 km/h antes del impacto. Se comprende el coste del sistema, pero al incorporarse junto al avisador de cambio de carril, el coste de una tecnología más exigente se diluye en gran parte.

Fuente: ADAC