CAJAS NEGRAS EN LOS VEHÍCULOS



Un lector me comentaba  hace unos días que había visto una noticia en un programa de televisión sobre un dispositivo llamado "caja negra". Consiste básicamente en una cámara de vídeo colocada en el parabrisas interior delantero del vehículo, y además de grabar todo lo que se ve,  también hace las funciones de tacógrafo.

Propone Javier Reyes que se podría implementar este dispositivo en el Sector del Transporte por Carretera, (...) podríamos incluso decir que está muy bien para aquellos conductores que decidimos respetar las normas y formas de circular y así en caso de accidente demostrar nuestra inocencia (...), comenta que las compañías aseguradoras deberían exigir este dispositivo para todos los vehículos sin excepción alguna, tanto para turismos como para vehículos industriales. 

No me parece mala idea. Este dispositivo no es novedoso. La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ya lo instaló en sus vehículos a principio de los noventa. Los más viejos del lugar se acordaran de que se trataba de una cámara de vídeo que grababa las infracciones que cometían los usuarios en carretera. Además,  iba equipado con un vídeo-grabador y un monitor en el maletero, para poder visionar el vídeo de la "infracción" junto con el conductor. Era bastante efectivo porque los conductores podían observar su error inmediatamente, y enmendarlo en futuras acciones.

Posteriormente en marzo del 2004 se instauró en la ATGC los servicios unipersonales de vigilancia de autovías (SUVA) cuyo objetivo era incrementar la presencia de agentes en la carretera y su capacidad de respuesta. Estos vehículos estaban dotados de sistemas de grabación de imágenes y sonidos. 


La forma de actuar cambió con estas unidades. El agente, una vez parado el vehículo que había cometido la infracción, activaba los dispositivos técnicos de forma que se grabara el sonido y las imágenes de la actuación. La grabación de imágenes no estaba destinada a corregir conductas infractoras como el caso anterior (salvo honrosas excepciones). Craso error.

Este sistema no tuvo mucho éxito. La Dirección General de Tráfico invirtió ocho millones de euros, cifra que incluía el repertorio tecnológico (cámara, pantalla, equipo de grabación de imágenes y sonido, sistemas de transmisiones...), todo destinado a salvaguardar al agente, desaprovechando la oportunidad de emplear ese material en velar por la Seguridad Vial.

Pero centrémonos en el título de la entrada, últimamente se están desarrollando por algunas compañías electrónicas dispositivos llamados "cajas negras", un novedoso sistema que llega al público en dos modelos de características similares, es en sí un GPS con algunas funciones adicionales como cámara de video en calidad VGA y algunas otras utilidades como la grabación de voz. Dentro de los sistemas que posee se encuentran los que guardarán datos como la velocidad, la posición y las rutas que el conductor haya seguido y se puede utilizar también como tacógrafo. La ventaja es que en el caso de los mapas, la utilidad es compatible con el software Google Maps por lo que cualquiera puede leer la información desde un ordenador con conexión a internet.




Sirve para cualquier tipo de vehículo, tanto para turismos como para flotas de pequeño y gran tonelaje. Los datos y vídeos que graba podrían permitir deducir responsabilidades a la hora de un percance y el control de flotas logísticas y de taxis.

Si bien la utilidad es bastante relativa en lo que refiere a la validez de los datos como prueba en caso de llegar a juicio porque esto depende en gran medida de cada juez,  seguramente las aseguradoras no demoren mucho en ponerlo como condición en sus seguros de coche.

Lo último en esta tecnología es el "piloto automático temporal", y viene de la mano de Volkswagen. Un sistema que permite que el coche conduzca "casi" él solo sin que tengamos que llevar las manos al volante. Lo ha bautizado "Haveit Highly Automated Vehicles for Intelligent Transport", y es fruto de un proyecto de investigación a nivel europeo.

Han participado institutos científicos de varios países (pero lamentablemente ninguno de España). El dinero para la investigación lo ha puesto la Unión Europea y varias marcas patrocinadoras, (no sólo Volkswagen, también está Continental o Volvo, entre otras) así como también varias Universidades. El objetivo es conseguir coches más descansados y seguros.


El sistema es semiautomático y funciona en autopistas hasta una velocidad de 130 km/h. No llega a ser un sistema totalmente automático en el que no se requiera en ningún momento la acción del conductor (este sigue teniendo la responsabilidad de "ir al volante" y tiene que supervisar el sistema).

Supone un interesante avance con respecto a los sistemas de conducción asistida que conocíamos hasta ahora (como por ejemplo los sistemas de ayuda al estacionamiento tipo park assist que casi aparcan el coche solos). El conductor puede desactivarlo siempre que quiera conducir de manera convencional.

Este sistema de "piloto automático" utiliza varias tecnologías. Combina el sistema de control de crucero adaptativo (que mantiene una velocidad constante decidida por el conductor, pero vela constantemente por mantener la distancia de seguridad óptima), el sistema de control de cambio de carril involuntario (que actúa sobre la dirección), el sistema de reconocimiento de señales de velocidad máxima y prohibido adelantar y el sistema de frenado automático en caso de emergencia.

Y todo esto empleando diferentes sensores que envían los datos a una pequeña computadora que se encarga de mantener la marcha en condiciones de seguridad. Emplea un radar (ondas de radio que miden distancias y velocidades), una cámara (que recoge objetos, al estilo del sistema ContiGuard del socio en la investigación Continental), sensores ultrasonidos, un escáner láser (capaz de ver en 3D) y un horizonte electrónico. Como una imagen vale más que mil palabras os dejo un vídeo del aparatito.



Estos sistemas no sólo sirven para turismos, los camiones, furgones e incluso autocares también podrían usarlo perfectamente, y es muy probable que los profesionales del transporte lo agradecieran (estar al volante cansa más de lo que parece y la espalda sufre bastante). 

Por ejemplo se podrían usar en los atascos de las autovías o en los de las grandes ciudades, con la consiguiente relajación para el conductor. En definitiva lo que hasta hace poco parecía de película de ciencia ficción, cada día parece estar más cerca. Quien no ha visto esas películas en que los vehículos circulan solos por las carreteras.

Soy de los que piensa que la tecnología está al servicio del ser humano, que las máquinas fallan, seguro, pero no hay que desaprovechar todo lo que nos ofrece la innovación tecnológica, sobre todo si lo que ofrece es seguridad y comodidad, aunque siempre nos quedará desconectarlo un ratito para disfrutar de la conducción.

Fuentes:
Vídeo YouTube
Bolsa de Seguros
Motor pasión
Volkswagen